Resultados preliminares de las elecciones en Honduras: la injerencia estadounidense agrava las tensiones existentes
2 de diciembre 2025
El domingo 30 de noviembre se celebraron elecciones generales en Honduras. A pesar de las preocupaciones sobre la integridad del proceso electoral y de algunas irregularidades denunciadas durante el periodo de votación, las elecciones se desarrollaron de forma pacífica y ordenada, y los observadores electorales informaron de una alta participación. Desde entonces, los retrasos en el recuento de votos, la estrecha diferencia entre los candidatos con mayor votación y la continua injerencia de Estados Unidos ha aumentado las tensiones en el país. En respuesta a los resultados preliminares de las elecciones, el Instituto Calan comunica su preocupación por lo siguiente:
Falta de confianza en el proceso electoral e injerencia estadounidense. En los meses previos a las elecciones, las luchas políticas internas en el Consejo Nacional Electoral (CNE) y las deficiencias logísticas y técnicas afectaron la confianza en las elecciones. La desconfianza en el proceso electoral se vió agravada por acusaciones de fraude entre los distintos partidos.
Para empeorar las cosas, en los días previos a las elecciones, el presidente estadounidense Trump respaldó públicamente al candidato del Partido Nacional, Nasry «Tito» Asfura, en flagrante violación del principio de no intervención. Rodolfo Pastor, exsecretario de la Presidencia, ha declarado que es probable que la intervención preelectoral de la administración Trump—una administración que ya ha demostrado su disposición a utilizar la fuerza económica y militar para castigar e intimidar a los gobiernos que no le gustan—haya contribuido a la competitividad de Asfura frente a Nasralla. El 1 de diciembre, Trump echó más leña al fuego al amenazar abiertamente con que habrá graves consecuencias si no le gustan los resultados de las elecciones.
En la actualidad, la tensión sigue siendo alta, ya que el sistema de transmisión de resultados electorales preliminares (TREP) sufre problemas técnicos, lo que mantiene la incertidumbre sobre la integridad de los resultados electorales. El CESPAD, coordinador hondureño de una misión internacional de observación electoral, ha declarado que «el único resultado válido es el del escrutinio general – no el del TREP – y que todas las actas deben ser contadas, revisadas y documentadas».
Los movimientos sociales y los defensores de los derechos humanos hondureños corren un riesgo elevado. A la cabeza del recuento electoral para la presidencia se encuentran el candidato del Partido Liberal, Salvador Nasralla, y el candidato del Partido Nacional, Tito Asfura, mientras que la candidata del Partido Libre, Rixi Moncada, se encuentra detrás de ellos por un gran margen de votos. Tanto Nasralla como Asfura representan intereses políticos y económicos que pueden aumentar la violencia contra los defensores de los derechos humanos y afectar directamente las luchas históricas por la transformación social y económica del país.
Estados Unidos indulta al ex-narcodictador de Honduras. El 2 de diciembre, el expresidente de Honduras Juan Orlando Hernández fue indultado por el presidente Trump y liberado de la prisión federal, donde debía cumplir una condena de 45 años por un delito grave de tráfico de drogas. Esta medida destruye la poca justicia que había para los innumerables crímenes de Hernández. Como presidente, Hernández presidió uno de los períodos más violentos de la historia de Honduras, caracterizado por la represión violenta de las protestas populares, la persecución de los defensores de los derechos humanos y los escándalos de corrupción a gran escala. Hernández contó con el respaldo del Gobierno de Estados Unidos durante todo su mandato.
El Instituto Calan:
Apoya a todas las personas, comunidades y organizaciones que defienden la dignidad y el bienestar de los pueblos de Honduras y el medio ambiente, independientemente de quién ejerza el poder del Estado.
Condena todos los esfuerzos que han comprometido el derecho del pueblo a decidir su futuro político mediante elecciones libres y justas. Condenamos especialmente las intervenciones de la administración Trump, que responden claramente a elementos políticos y económicos vinculados al crimen.
Condenamos enérgicamente el indulto al expresidente Juan Orlando Hernández y apoyamos los esfuerzos continuos para garantizar que se haga justicia por todos los delitos cometidos durante su gobierno.